Lo
primero que destacaría de la visita a Silicon Valley es que merece la pena alejarse
de España unos cuantos días y varios usos horarios, como sucede en California.
Esas 9 horas de diferencia te hacen desconectar, aún más si cabe, de la cruda
realidad cotidiana y la espiral negativa en la que estamos irremediablemente
inmersos.
En
España experimentamos una profunda depresión (psicológica más que económica) y
la conexión 24 x 7 a nuestros laptop, tablets, ipad, iphones nos bombardea con
pésimas noticias, una detrás de otra. Resulta un alivio llegar a un lugar en el
cual, en una semana, no hemos oído mentar la “prima de riesgo”. Me apuesto a
que muchos de los CEO con los que hemos estado no tienen el gusto de conocerla.
Aquí en el valle se habla de otras cosas: Venture Capitals, Fundraising, start-ups, social networks, mobile apps,
social commerce…
Redes sociales y móviles
El
fenómeno de las redes sociales es una pasada. Combinado con la movilidad, una
locura. En todos los lados hay alguien enredando en el Facebook o tweeteando:
en los Starcbucks, en el metro, esperando al autobús y hasta en las fiestas.
Los
móviles están acaparando todo (redes sociales, fotos, videos, juegos, compras,
pagos…) y están cargándose a los retailers tradicionales. No saben qué hacer;
se han convertido en escaparates donde la gente ve el producto, lo toca, lo
prueba…pero luego lo compra desde su iPhone al mejor postor.
Cientos
de negocios del valle dedicados a móviles, apps, juegos, redes sociales…crecen
cada día. No es lo mismo que en la época dorada de las puntocom, pero esta
vitalidad empresarial contrasta con lo que vemos cada día al otro lado del gran
charco.
El valle es una isla
Pero
no todo es color de rosa. Silcon Valley es una isla en el mundo y en los
propios Estados Unidos de América. Y, una vez remarcado lo positivo de ese
aislamiento mental, he de resaltar los aspectos negativos de un ecosistema tan
endógeno como el del valle. A las empresas les interesa bien poco lo que sucede
en Europa (ni que decir lo que sucede en tercer mundo), en la América profunda
e incluso en su propia calle. En el centro de San Francisco puedes estar
hablando en unas megaoficinas de Market Street sobre venture capitals, business
angels, fund raising, operaciones de veinte millones de dólares, ingresos de
cientos….tomar el ascensor, salir a la calle, caminar tres manzanas y
encontrarte decenas de homeless.
Están ahí, tú los ves…pero ellos no los ven. La capacidad de asilarse es una
virtud, pero se convierte en repudiable cuando aflora la falta de humanidad en
los corazones.
¿Van
bien las cosas en Silicon Valley? Casi todo parece indicar que sí; salidas a
bolsa, inversiones de fondos de capital riesgo, ingresos, creación de
start-ups… Pero Unai Urresti (uno de los directos vascos de empresas de
Internet que más tiempo lleva viviendo en el valle) nos suministró un dato para
la reflexión: él llegó a Silicon Valley en pleno apogeo de las empresas
puntocom; el pico de empleos alcanzado en aquella fecha queda muy lejos de la
cifra actual. Una cosa es la tasa de desempleo actual (que no es elevada) y
otra el número de personas trabajando. En estos momentos en el valle la cifra
de personas con empleo es la misma que en 1990. No se crea empleo;
paulatinamente se destruye. La actividad productiva mengua. Los servicios poco
cualificados también. El valle genera riqueza para los inversores, empresarios,
empleados altamente cualificados, pero no se crea empleo neto y la gente poco
cualificada se be avocada a la indigencia o a la emigración.
Hace
unos años Obama se reunió con los auténticos reyes de Silicon Valley: los
mandamases de Intel, HP, Google, Apple… Les preguntó qué debiera hacer para que
en el valle se volviera a crear empleo; para que regresaran todos los puestos
de trabajo deslocalizados en China, Corea, Indonesia. Steve Jobs, siempre claro
y directo le dijo “Quítate esa idea de la cabeza Barack; esos empleos no
regresarán jamás”. Nadie en USA está (ni
estará) dispuesto a trabajar 12 horas diarias 7 días a la semana ensamblando
iPhones por 300 dólares mensuales. En España debiéramos tener un Steve Jobs que
dijera las cosas claras a nuestros gobernantes.
Emprendizaje
Uno
de los ejes de trabajo de este viaje a Silicon Valley ha sido el emprendizaje.
El Master in Internet Business 2.0 de ESEUNE está orientado a personas que
desea crear su propia empresa en ese ámbito 2.0, de ahí que en el viaje de
trabajo al valle hayamos profundizado en este aspecto.
Cuando
comento a los alumnos que dentro del Master tenemos una semana de trabajo en
Silicon Valley, ellos piensan en grandes empresas de Internet, grandes redes
sociales; pero yo insisto: la lección más importante que se puede aprender en
el valle es otra; es sobre emprendizaje. Porque conozco pocos lugares en el
mundo donde el significado de esta relevante palabra alcance toda su extensión.
En
España para muchos emprender es (gracias a la inestimable ayda de muchas
administraciones públicas que han desvirtuado el concepto) la última
alternativa a la que puedes agarrarte una vez te falla encontrar un trabajo,
hacer oposiciones…. En España los verdaderamente brillantes preparan
oposiciones, los universitarios con buen expediente consiguen un curro
mileurista y los demás…terminan en una agencia de desarrollo local haciendo un
curso de emprendizaje y mareando la perdiz de la mano de un tutor experto en
emprender (pero que en su puñetera vida a emprendido; es más, algunos ni
siquiera han trabajado jamás en una empresa). Y así nos luce el pelo.
En
el valle lo primero que aprendes es lo más importante para el emprendizaje: las
ganas de emprender. Cuando me siento en un banco de Stanford y veo pasar a los
estudiantes enganchados a sus iPod, me imagino lo que circulará por dentro de
sus cabezas; estoy seguro que en muchas de ellas, las ganas de montar su propio
negocio (y no creo que me equivoque demasiado). Lamento decir que eso mismo no
me sucede cuando paseo por los campus de las Universidades españolas.
Y
después de lo verdaderamente relevante (las ganas), viene lo secundario, pero
no por ello menos relevante: el ecosistema del valle (primer elemento de
análisis en nuestro viaje). Mis alumnos me lo llevan oyendo decir desde mis
primeros contactos con el valle a mediados de los 90:
- Dos de las mejores Universidades del mundo (Stanford y Berkeley), que por cierto, eclipsan a otras varias Universidades espectaculares a su alrededor, atraen al mejor talento de cualquier lugar del mundo (quien no recuerdo el libro de Richard Florida “The Rise of the Creative Class” y los factores de “brain atraction”)
- Pasta a tutiplé; no solo fondos de capital riesgo y business angels, sino fondos federales (el departamento de defensa financia muchos proyectos de investigación en laboratorios increíbles con el Lawrence Livermore o el Lawrence Berkeley National Lab)
- Y la desenfada forma de ser del californiano (algún antiguo alumno igual recuerda mi teoría sobre la falla de San Andrés y la personalidad de los individuos de la zona, que no tienen miedo a perderlo todo…ya que con la falla de por medio…nadie tiene nada) que estimula el riesgo, la innovación…(una de mis muchas teorías absurdas…o no)
La
sociedad de Silicon Valley fabrica emprendedores en la misma proporción que la
sociedad española construye funcionarios. Que cada palo aguante su vela.
Por
eso el principal punto de análisis en este viaje ha sido el estudio de ese
ecosistema para el emprendizaje. Creo que hay mucho talento es España que puede
encontrar en el valle su lugar natural, máxime cuando las oportunidades en la
vieja piel de toro brillan por su ausencia. De ahí que resuma algunas conclusiones para esos emprendedores que han
pensado desarrollar su negocio en Silicon Valley:
- Si buscas financiación para tu proyecto, has de tener un producto. Si tu empresa es de servicios, pasa por la ventanilla del banco y pide un crédito. Venture Capitals (VC) y Business Angels (BA) invierten en compañías con producto (rara ve lo hacen en empresas de servicios)
- No te obsesiones con preparar un Business Plan tirando de manual (nunca te compres un libro que se titule “cómon hacer un plan de negocio” o algo para el estilo; si vienes al valle entra en Amazon y carga tu carro con varios títulos sobre Fundraisng). No están estudiando cuarto de Empresariales. Aquí les importa un bledo el Business Plan. Un sumario ejecutivo y una buena Excel bastan. Pero recuerda el viejo refrán y adáptalo: lo breve solo sirve si es realmente bueno; lo breve si no es excepcional no conduce muy lejos.
- Es fundamental el asesoramiento de expertos locales. En la Excel no se van a fijar ni en los beneficios netos, ni en el cash-flow… ni en esas cosas que enseñamos en los MBA de las Escuelas de Negocios. En el valle utilizan una métrica propia, comparativa con otros modelos de negocio similares. Los yanquis son muy científicos y los modelos estadísticos y métricas comparativas les mola. Son de ciencias y creen en los números (no son latinos, de manera que no te bases en las palabras bonitas)
- Esos ratios han de demostrar un cosa (si o si): crecimiento. Pero nada de un 10% anual. Tu negocio ha de crecer cinco veces en tres o cinco años, o no es atractivo para los inversores del valle. Si llevas un Business Plan a un fondo de capital riesgo público en España y dices que vas a crecer un 20% anual te dicen que repases las cifras y que no se te vaya la olla demasiado. En Silicon Valley te dirían que con ese crecimiento raquítico no vas a ninguna parte.
- Marketing orientado al crecimiento: de manera que todas las tácticas relacionadas con el posicionamiento, las ventas, las consecución de clientes…han de estar orientadas a ese mantra: crecer (aquel “Get big fast¡” que popularizó Jeff Bezos de Amazon a mediados de los 90 sigue siendo un must)
- Si tienes una red social y pasa en un año de 100 a 2.000.000 millones de usuarios consigues 5.000.000 de dólares sin problema. No tienes que ganar dinero para ello; de hecho, ni tan siquiera tienes que ingresar; tampoco es necesario que tengas definido cómo piensas ganar dinero. Basta con que sepas que lo vas a ganar y que ellos sepan que lo sabes. Hemos estado con el CEO y fundador de una start-up que hace un año conocí en Red Wood City; hace doce meses, los tres creadores de la idea iban con un iPhone en la mano mostrando a todo quisqui una aplicación que tenía tres días y cincuenta usuarios. Hoy tienen dos millones en cien países, treinta trabajadores y varios millones de dólares en el banco (que se gastarán hasta el último centavo antes de que vuelva a verles en año próximo; para entonces habrán completado otra ronda de financiación)
- Si te dan dinero, es para que te lo gastes. El capital riesgo no es un colchón ni una línea de crédito. En España en ocasiones parece que te prestan capital para que se lo cuides en el banco; al menos cinco años hasta la salida. Aquí te lo dan para que lo gastes a la velocidad de la luz en ingenieros que metan líneas de código como locos, marketing, test con los usuarios, relaciones públicas…
- De manera que cambia el chip; demuestra que tu negocio tiene potencial para crecer, qué tu sabes cómo hacerlo; piensa en grande y sobre todo piensa rápido. El valle no está hecho para los Seat Ibiza de 90 caballos; aquí molan los Camaro con 400.
- Los VC (Venture Capitals) del valle entran y quieren salir rápido: entre tres y cinco años. Y esperan multiplicar por 5 su inversión. Así que aquí tienes una buena forma de comenzar a preparar tu proyecto.
Españoles por el mundo
Estuvimos
con varios emprendedores españoles (todos unos fenómenos a los que admiro).
Algunos llevan años y están consiguiendo buenos resultados; otros llevan meses;
y algunos unas pocas semanas. Los consejos que nos dan a los emprendedores
españoles que están pensando en venir a Silicon Valley son claros y te los
resumo en 5 puntos:
- No vengas hasta que tengas un producto sólido y testado.
- Busca la financiación inicial en España; consigue 300.000 euros allí, evoluciona tu producto, consigue algún cliente, téstalo…y ven a Silicon Valley en busca de los próximos 3.000.000 millones de dólares para el siguiente paso de tu start-up.
- Piensa en grande. Aún así te quedarás corto. Si vienes aquí es para competir en la Champions League. Si continuas pensando en plan Racing de Santander regresarás a España en doce meses con la mejor experiencia de aprendizaje de tu vida en la maleta y cero dólares en el bolsillo. Y no me refiero a pensar en grande para conseguir un venture capital que invierta un millón de pavos en tu negocio. Si no piensas en grande (y vendes en grande) te será difícil encontrar buenos ingenieros, buenos consultores, buenos vendedores, buenos relaciones públicas…
- Antes de venir tienes que tener los deberes bien hechos: pon en orden tu casa antes de dar el salto a California. El email y el Skype hacen maravillas, pero gestionar una empresa con 9 horas de diferencia en contra tiene miga. Si vienes a Silicon Valley tienes que dedicar 24 horas al día a tu proyecto: 16 cuando trabajas y 8 cuando sueñas. Deja todo en orden en tu empresa antes de venir. Si tienes otros socios, que sean conscientes de las dificultades con las que te vas a encontrar; que no esperen resultados en tres semanas. Ni en tres meses. Cuando lleves un año en Silicon Valley y los resultados todavía no se hayan materializado (y el saldo de la cuenta bancaria haya descendido) que no piensen que llevas doce meses de vacaciones en San Francisco montando en el cable-car y tomando sopa de almejas en el Fisherman Warf.
- Y sobre todo, estudia bien tu situación familiar. Si tienes pareja y tienes hijos, dedica tiempo a preparar un buen plan. En muchos casos el desafío critico no se encuentra ni en el mercado, ni en las finanzas, ni en la tecnología…sino en la familia.
Una
vez que hayas resuelto estos cinco problemas esenciales aparecerán otros veinte
más y todos ellos importantes: el idioma, los visados, encontrar casa (que no
te moleste si te tratan como a un emigrante, porque aunque no te lo creas, eso
es lo que eres), los seguros médicos, la cultura…..
Olvida
lo que has aprendido sobre marketing y sobre recursos humanos. Aquí todo sigue
sus propias reglas. El marketing es otra dimensión, en la cual el crecimiento
es clave y las relaciones públicas esenciales. En España podrás ser el Rey del Manbo y tu empresa la niña
mimada de las administraciones públicas, pero aquí en el valle tu no eres nadie
y tu empresa una entre un millón hasta que los magos de las public relations consigan lo contrario.
Si piensas que lo puedes conseguir con un community
manager que maneja el hootSuite y
unos cuantos dólares en Adwords eres
un ingenuo. Construye bien tu marca personal (es otro de los inconvenientes
para los españoles; en nuestro país no estamos acostumbrados –incluso está mal
visto- a vendernos)
Mención
a parte merecen los empleados. Toda tu experiencia hasta la fecha manejando
equipos en España sirve de muy poco cuando llegas al valle. Tú eres el nuevo,
el que menos sabe, el más pardillo, y español; jugarás bien a soccer pero no te veo derrotando a
Eventbrite. Y claro, los empleados se te suben a la chepa (expresión literal de
un directivo español con cuatro años de experiencia en el valle cuyo anonimato
preservamos para que sus empleados no le pasen factura) a la primera de cambio.
Aprender a manejar el recurso humano en el valle tiene miga. Pero no te quedará
otro remedio que hacerlo si quieres progresar.
Domar a los leones lleva tiempo, pero una vez que lo consigues los
resultados son geniales; estos fieras se llevan por delante lo que sea.
Ebay y PayPal
En
una semana visitamos algunos de los gigantes del valle. Especialmente emotiva
fue la visita a eBay, uno de los dinosaurios supervivientes del pleistoceno
puntocom. Aún recuerdo aquellos años 90,
cuando escribía mi primer “Marketing en Internet” y recorría la 101 en busca de
casos y cosas con la ayuda de mis amigos de Berkeley (Larry, Richard,
Charles…¡va por vosotros!); mi primer encuentro en San José con personas que
trabajaban en un negocio de subastas llamad eBay, que merecieron varias páginas
en varios de mis libros (¡aún recuerdo! La única puntocom que había ganado
dinero desde el primer día).
Hoy
sus campus de San José poca relación guardan con aquellas oficinas que visité
en 1998 en el 2145 de Hamilton Avenue en San José: modernas instalaciones,
restaurantes, jardines…(demasiado inspirados en Google si hay que ponerles
alguna pega). Nos recibieron dos fenómenos de PayPal: José da Ponte y Fernando.
Lo que más llama la atención es la historia de la relación eBay-PayPal. Al
principio, de odio; eBay hacía todo lo que podía para que PayPal fracasara.
Pero con los usuarios no pudieron; éstos querían pagar con PayPal y el gigante
de las subastas acabó comprando la empresa en 2005. Luego llegaría el fenómeno
de los smartphones y el espectacular
crecimiento de los pagos electrónicos, tanto online como offline. Y hoy, la empresa comprada supera a la gigantesca matriz
en número de usuarios: eBay tiene 102 millones y PayPal 110.
Por
cierto, en eBay nadie habla de e-commerce.
Eso es historia. Solo hablan de commerce.
Aunque aún únicamente un 6% de las ventas son online, un 37% del total están
condicionadas por Internet (el usuario utiliza la red para buscar, comparar y
cada vez más las redes sociales para recibir inputs sobre sus decisiones de
compra –social commerce ). Lo que
Jose llama “the Mall in their pocket”.
Un mundo en el cual el inventario es infinito.
Banjo
Hace
un año participé en una de esas actividades de networking tan frecuentes en
Silicon Valley. Llevé allí a los alumnos del MIB 2.0 para que vieran como
funcionan esos eventos en los que la gente se intercambia tarjetas y se cuentan
unos a otros sus proyectos en tres, cuatro minutos. Aquel se llamaba Red Wood
City Silicon Valley Networking café.
Una
chica se acercó a mi con jovialidad. “Hi!.
I´m Jennifer…and this is Banjo!”. Sacó su iPhone y me mostró una aplicación
basada en Twitter, Facebook y Google Maps. Muestra un mapa de tu zona y te dice
cuántos usuarios y quiénes están en el mapa. Me pareció genial. La aplicación
tenia tres días de vida y varias decenas de usuarios (incluido yo; Jennifer me
invitó a descargarla en mi iPhone de la App Store y allí mismo comencé a
usarlo).
Un
año después regresé a Redwood City para conversar con Jennifer y con Damien
Patton, el fundador y CEO de Banjo. Nos contó como imaginó Banjo mirando por la
ventana al océano pacífico desde su casa (alquilada) dibujando sobre hojas de
un bloc (que hoy adornan la entrada de sus oficinas) recordando una anécdota
con un antiguo compañero con el que coincidió en el aeropuerto después de
muchos años sin verse, sin poder volver a hacerlo (Se enteró por Facebook unos
días después que habían estado en el mismo sitio a la misma hora) . Un año
después, las tres personas que iniciaron Banjo son ya treinta y las decenas de
usuarios se han convertido en dos millones. Todavía no han facturado un solo
dólar; ni tienen previsto hacerlo. Pero han levantado unos cuantos millones de
dólares para seguir creciendo. Cuando les preguntas como piensan ganar dinero,
en los ojos de Damien se ve un brillo especial que te hace estar seguro de una
cosa: él lo sabe. Nos habló de Lewis Hamilton y Vodafone, de Fernando y el
Santander…y de una cosa que él llama emotional
branding con la que él (y sus VC) esperan facturar millones de dólares
pronto.
Softonic
Con
110 millones de usuarios únicos y 50 millones de euros de facturación, esta
empresa española es líder mundial en su negocio (prescripción de software y
descargas). ¿Quién no se ha descargado un programa desde sus servidores? Cada día se hacen 3 millones de descargas
desde Softonic. Los amos de la barraca, pero no eran nadie en los Estados
Unidos. Porque una cosa es ser líder mundial y otra ser líder en Estados
Unidos, donde Softonic era uno más entre muchos. Por eso Santiago Arano
presentó hace cuatro año un plan para acabar con esa situación. Compartimos con
él una genial reunión en unas preciosas oficinas justo debajo del Bay Bridge
con preciosas vistas a la bahía de San Francisco. Con él descubrimos las
complejidades de un negocio español que intenta hacer las américas; que el
tráfico en USA vale cuatro veces más…y por qué lo vale. Un tipo encantador que
conduce a Softonic Norteamérica a donde le corresponde.
Twitter
Esta
vez nos tocó reunirnos en sus nuevas oficinas de San Francisco. Pero salí con
las mismas dudas con las que salía de las anteriores: ¿dónde narices está el
modelo de negocio? Menos mal que ya no escribo libros sobre Internet, porque
escribiría eso mismo…y un año después seguro que estarían ganando cientos de
millones de pavos al año… y mis lectores volverían a vacilarme. Lo bueno que
tienen los blog es que si eso sucede…siempre puedo borrar el post (je,je,je.).
Pero no lo veo por ninguna parte. Reconozco que fundamentalmente porque no
tengo ni puñetera idea sobre la materia. Pero siempre que salgo de Twitter me
viene a la cabeza el famoso "They
Promised Us Flying Cars, Instead We Got 140 Characters"
Eventbrite
Un
caso estupendo. Y una presentación excelente por parte de cuatro personas
diferentes de la empresa que nos hablaron cada uno de ellos de su ámbito:
marketing, producto, tecnología y personas.
Por cierto, mientras que en Google nos llevaron a la tienda de
Merchandising en Eventbrite nos regalaron una gorra y una chapa.
IDEO
Otra
de mis niñas mimadas del valle. Ya se que no tienen mucho que ver con los
negocios 2.0, Internet, Redes Sociales…Pero las lecciones que allí aprendemos
considero que son siempre relevantes; en un mundo repleto de ingenieros, el
factor humanos es importante. Ellos lo diseñan, pero las personas lo usamos. La
gente de IDEO lleva décadas trabajando con ingenieros para hacer la tecnología
usable, humana. Desde el ratón del Mac al de Microsoft pasando por las Palm que
inspiraron los Smartphones.
Grandes personas
Sin
olvidar algo que no puede faltar en el valle: la visita a dos de mis museos
favoritos (Intel y Computer History Museum). Pero lo mejor del valle siempre
son las reuniones con personas brilllantes a las que admiro y respeto, ya que
son el vivo ejemplo de los valores que transmitimos en ESEUNE. Personas como
Eneko Knör de Ideateca, Xavi Verdaguer de Innovalley e Imagine, Alfonso de la
Nuez de UserZoom, Santiago Arano de Softonic, Juan Pablo Puerta de Craiglist,
Unai Urresti de FriendFinder, Isabel Arcones…. ¡Gracias a todos por vuestros
consejos! DE verdad, aunque ahora no seáis conscientes, soy una cadena de
transmisión que los hará llegar a muchas personas y para algunos vuestros
valiosos consejos resultarán de gran ayuda. Seguid así y sentíos orgullosos.
¡Ah! Y work hard and play harder!